Esta receta tiene sabor griego, son unas sabrosas empanadillas de queso feta que ellos llaman tyropitákia, pero que también se las llaman tiropitas. Aunque da igual el nombre, lo bueno es que son muy sencillas de hacer y tienen un sabor magnifico.
Ingredientes (salen unas 9 empanadillas)
- 3 hojas de pasta filo
- 200 gramos de queso feta
- 1 huevo
- Hierbabuena fresca
- 1 cucharadita de orégano
- 25 gramos de mantequilla
Preparación:
Me gusta que los ingredientes sean lo más frescos y naturales posible, por eso esta vez he usado la hierbabuena que tenemos plantada en nuestro pequeño huerto urbano, que este año con la lluvia que estamos teniendo en primavera nos está alimentando de maravilla las plantitas. Y aquí está nuestra hierbabuena urbana...
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Y ahora la receta, en un bol añadir el queso feta troceado, batimos el huevo y picamos muy bien la hierbabuena fresca.
Con un tenedor aplastamos bien el queso e incorporamos los ingredientes: huevo batido, hierbabuena picada y el orégano.
Ahora derretimos un poco la mantequilla, dejarla liquida puesto que vamos a 'pintar' el interior de la pasta filo, pero eso sí, que no esté muy caliente.
Hacemos tres tiras de cada hoja de pasta filo, pintamos con la mantequilla y ponemos un poco de la mezcla del queso en un extremo.
Y así quedan las empanadillas tras ir envolviendo en forma de triángulo.
Precalentamos el horno a 180º con calor arriba y abajo y cuando esté ya caliente ponemos en la bandeja de horno con papel las empanadillas.
Y ya sólo queda esperar entre 15 y 20 minutos, en cuanto veáis que están doradas sacarlas del horno e intentar comerlas enseguida, aunque ya os digo que no duran mucho en la mesa ;)
